Del Santo Evangelio según San Mateo 7,7-12.
Jesús dijo a sus discípulos:
Pidan y se les dará; busquen y encontrarán; llamen y se les abrirá.
Porque todo el que pide, recibe; el que busca, encuentra; y al que llama, se le abrirá.
¿Quién de ustedes, cuando su hijo le pide pan, le da una piedra?
¿O si le pide un pez, le da una serpiente?
Si ustedes, que son malos, saben dar cosas buenas a sus hijos, ¡cuánto más el Padre celestial dará cosas buenas a aquellos que se las pidan!
Todo lo que deseen que los demás hagan por ustedes, háganlo por ellos: en esto consiste la Ley y los Profetas.
Pidan y se les dará; busquen y encontrarán; llamen y se les abrirá.
Porque todo el que pide, recibe; el que busca, encuentra; y al que llama, se le abrirá.
¿Quién de ustedes, cuando su hijo le pide pan, le da una piedra?
¿O si le pide un pez, le da una serpiente?
Si ustedes, que son malos, saben dar cosas buenas a sus hijos, ¡cuánto más el Padre celestial dará cosas buenas a aquellos que se las pidan!
Todo lo que deseen que los demás hagan por ustedes, háganlo por ellos: en esto consiste la Ley y los Profetas.
HOMILIA
Por Pbro. Luis Zazano
Mt. 7, 7-12:
Jesús nuevamente nos muestra el camino de la oración como ese momento de pedido a Dios, es hablar con el Señor y pedirle lo que hoy estás necesitando. En este camino de interioridad todos estamos de acuerdo en que tenemos situaciones en que sentimos que todo se nos complica, que todo está mal. es como que nos metemos en una habitación negra, sin luces, y no encontramos la luz para ver por donde salir.
Es en esos momentos de oscuridades donde debemos cuidar ese diálogo con Dios ya que lo primero que puede aparecerte como solución es la autosuficiencia; si te pones a ver la historia de la Iglesia recordá las cruzadas y san Francisco; las cruzadas fueron esa defensa de cueste lo que cueste de los lugares sagrados, sólo se consiguió muertes.
Francisco con la oración, la humildad y el servicio consiguió hasta la actualidad el cuidado de lo lugares sagrados. Creo que esto nos enseña que no podemos tener nuestra vida como cruzadas en donde buscamos enfrentarnos con los problemas al choque sabiendo que es más fuerte que nosotros, No, debemos ir ante los problemas al estilo de San Francisco, con HUMILDAD, ORACIÓN Y SERVICIO.
Que estas tres características aparezcan hoy en tu cuaresma y te aseguro que a pesar de perder muchas cosas en tu vida te harás custodio de aquello que hace sagrado a tu vida.
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