Del Santo Evangelio según San Lucas 11,42-46.
«¡Ay de ustedes, fariseos, que pagan el impuesto de la menta, de la ruda y de todas las legumbres, y descuidan la justicia y el amor de Dios! Hay que practicar esto, sin descuidar aquello.
¡Ay de ustedes, fariseos, porque les gusta ocupar el primer asiento en las sinagogas y ser saludados en las plazas!
¡Ay de ustedes, porque son como esos sepulcros que no se ven y sobre los cuales se camina sin saber!".
Un doctor de la Ley tomó entonces la palabra y dijo: «Maestro, cuando hablas así, nos insultas también a nosotros».
El le respondió: «¡Ay de ustedes también, porque imponen a los demás cargas insoportables, pero ustedes no las tocan ni siquiera con un dedo!»
¡Ay de ustedes, fariseos, porque les gusta ocupar el primer asiento en las sinagogas y ser saludados en las plazas!
¡Ay de ustedes, porque son como esos sepulcros que no se ven y sobre los cuales se camina sin saber!".
Un doctor de la Ley tomó entonces la palabra y dijo: «Maestro, cuando hablas así, nos insultas también a nosotros».
El le respondió: «¡Ay de ustedes también, porque imponen a los demás cargas insoportables, pero ustedes no las tocan ni siquiera con un dedo!»
Lc. 11, 42-46:
Seguimos viendo a un Jesús que ataca al fariseismo. Ese fariseismo que implica religiosidad exacerbada, imposición autoritaria y comercialización de vida:
1) Religiosidad exacerbada: implica poner a Dios en cosas que no tiene nada que ver. Es más, te llegas a aprovechar de Dios y de la religión para auto justificante o quedar como "el intocable". Es eso de ser más papistas que el Papa pero también apuntala a un fanatismo religioso que ya cae en lo exagerado y hasta incluso en lo "ridiculo-caprichoso".
2) Imposición autoritaria: es esa actitud farisaica que puede caer cualquiera en donde queremos imponer por autoridad y no por lógica "aquí el cura soy yo y no se discute" o eso de "el que pone la plata soy yo y por lo tanto se hace lo que digo". Lo más gracioso es que le gusta imponer y mandonear. Y si no puede mandonear cae en el chismerio. No tolera ser el segundo o que delante de él exista alguien que guíe o coordine. Impone y es autoritario. "Hagan lo que digo pero no lo que hago".
3) Comercialización de vida: es como se mide que da él y qué es lo que le dan a él.
Se comercializa, se vende con tal de quedar bien parado... eso sí, sea como sea tiene que llegar a su objetivo, no le importa nada, solo le importa llegar arriba.
Hoy Jesús nos pega duro, porque nos vendemos, porque nos cuesta aceptar que otro maneje la batuta, nos golpea que otro sea más querido que yo.
JESÚS, SÁNANOS!!!!
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