Habéis sido almas escogidas en la Tierra para esta gran misión de salvación de almas.
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Junio 9 de 2016
Mensaje de Dios Padre, Nuestro Señor Jesucristo y la Santísima Virgen María a J. V.
Primer Misterio. Habla Nuestro Señor Jesucristo y la Santísima Virgen María.
Sobre: Preparaos para vuestro Juicio, si destruisteis el alma de vuestros pequeños, y para que se alivie en algo vuestro castigo, orad, insistentemente, para que tengaMos Misericordia sobre vosotros, los que no llevasteis a cabo, correctamente, vuestra tarea de educar a vuestros pequeños.
¡Mis hijos, Mis hijos! ¡¿Qué habéis hecho con ellos?! Cuánta maldad ha entrado en el corazón de Mis pequeñitos. ¡Vuestros hijos!, los que debisteis haber cuidado! Han perdido la inocencia desde muy pequeños, no les cuidasteis ésa vida sencilla, buena. ¡Cuánto mal ha contaminado el alma de estos pequeñitos!
Satanás se ha encargado, primeramente, de destruir vuestra espiritualidad y, vosotros, no habéis cuidado la espiritualidad de vuestros pequeñitos, ¡Mis hijos!
Soy vuestra Madre, la Siempre Virgen María y voy cuidando al rebaño y, especialmente, a los más pequeñitos.
Cuántos de vosotros os esconderéis, o querréis esconderos, en el momento de vuestro Juicio. Le pedisteis a vuestro Padre, Dios y Creador, bebés, para criarlos, pero, ¿qué hicisteis con ellos?
Se os juzgará severamente por la vida de vuestros pequeñitos, por lo que inculcasteis en ellos, por los valores que pusisteis en su corazón o la maldad con que destruisteis los valores que Yo pongo en cada pequeñito que baja a la Tierra.
Querréis esconderos, para que no veáis Mis Ojos llenos de Ira, Ira Divina, Mía, de Jesucristo, vuestro Salvador.
Mi Madre cuida de los pequeños, Yo los recibo de Ella, querréis apartaros del Juicio tan severo que vendrá sobre vosotros, los que no cuidasteis el alma de los pequeños que se os dieron, para que los criarais, los llenarais de Vida, de Mi Vida y de Mi Amor.
¿Qué cuentas Me daréis cada uno de vosotros, de los hijos que se os encomendaron?
Recordad que los pequeños, llevan como primera educación, la que toman de sus padres y ésa será la base para toda su existencia, si no les disteis buenas bases, desde ahí empezasteis a destruir el alma de los pequeños. Muchas veces, será difícil que tratéis de cambiar lo enseñado a vuestros hijos, que hagan a un lado la maldad que inculcasteis en un principio, por vuestra irresponsabilidad y por no pedirMe ayuda y, si estos, vuestros hijos, llegan a dar mucho problema en la Tierra, en cierta forma, vosotros como padres, recibiréis un castigo por lo que les enseñasteis o por el ejemplo que disteis.
Os di la vida de vuestros hijos, que son Mis hijos, y vuestros hijos debieron ser criados en el Amor y, ¿qué hicisteis con sus almas?
Preparaos para vuestro Juicio, si destruisteis el alma de vuestros pequeños, y para que se alivie en algo vuestro castigo, orad, insistentemente, para que tengaMos Misericordia sobre vosotros, los que no llevasteis a cabo, correctamente, vuestra tarea de educar a vuestros pequeños. Muchos llegáis a destruir la Obra, Obra Divina, porque no modelasteis el almita de vuestros hijos y, ¿qué haréis, pues, con ésas almas?
Acercaos a Mí, para que Mi Santo Espíritu os ilumine y podáis ayudarles a vuestros hijos a enmendar el camino.
Orad por aquellos que han hecho tanto mal, al no importarles el alma de sus hijos.
Os perdono, si realmente queréis enmendar el camino, ciertamente, lo que hicisteis mal, difícilmente lo podréis arreglar, pero, pedidMe a Mí, vuestro Dios, que salve ésas almas que se os encomendaron para hacerlas almas de Bien y que vosotros destruisteis, porque no tomasteis en serio la maternidad y la paternidad que se os concedió.
Gracias, Mis pequeños.
Segundo Misterio. Habla Dios Padre.
Sobre: Os he pedido que oréis en unión con vuestros hermanos de la Comunión de los Santos, para que se den los cambios que todos vosotros necesitaréis para presentaros en esta vida que pronto vendrá.
Hijitos Míos, el Reinado de Mi Hijo en la Tierra y en el Universo entero, se tiene que dar. ¿Estáis orando para ello, Mis pequeños? Os he pedido que oréis en unión con vuestros hermanos de la Comunión de los Santos, para que se den los cambios que todos vosotros necesitaréis para presentaros en esta vida que pronto vendrá. Estos Cielos Nuevos, Tierras Nuevas, una Vida Nueva, en donde aquellos de vosotros que aprendisteis a amar, podréis crecer espiritualmente.
¡Cuánto error habéis dejado entrar en vuestro corazón, Mis pequeños! Mi Hijo, os dio toda una Evangelización de Amor, que vosotros debisteis haber tomado, primeramente, como forma de vida y, ella misma, iba a ser vuestro escudo contra los ataques de satanás.
Vuestro error, Mis pequeños, es el de suspender la oración y la vida espiritual y, en esos intervalos, satanás se mete y va destrozando vuestra espiritualidad.
Si sabéis que desde que fue eliminado del Cielo Luzbella, su venganza ha sido la destrucción de vuestra espiritualidad. Si sabéis eso, Mis pequeños, ¿por qué no os habéis protegido?
Vosotros mismos os vais debilitando, porque no estáis tomando, cotidianamente, el Alimento Celestial, que es primeramente, la Sagrada Eucaristía y después la oración.
Cuando vosotros dejáis estos Alimentos necesarísimos para el desarrollo de vuestra alma, caéis y satanás se encarga de degradaros, de iros llevando hacia la obscuridad espiritual que, para algunos, después les será difícil levantarse.
Mis pequeños, os debéis unir para orar. En vuestra unión, os he dicho, radica vuestra fuerza, ciertamente, Yo oro con vosotros. Debéis de poner más empeño en levantar vuestra alma hacia la santidad.
No conocéis ni el día ni la hora en que vendrá el Justo Juez y, ¿cómo estaréis vosotros? ¿Cómo estará vuestra alma? ¿Estaréis preparados para rendir cuentas de toda vuestra vida? Acercaos a Mi Santo Espíritu, para que os haga ver vuestros errores, para que podáis enmendar vuestra vida, para que podáis regresar al buen camino y podáis ayudar a tantos y tantos de vuestros hermanos a que regresen a Mí.
No actuéis solos, satanás es muy astuto.
Buscad, buscad vuestro crecimiento espiritual y Yo estaré ahí, ayudándoos. Busco almas llenas de amor, almas que quieran ser perfeccionadas, almas que sean otros Cristos aquí en la Tierra y que puedan ayudar a sus hermanos a crecer.
Vivid en el Amor, pero en un Amor Verdadero, en un Amor Santo, en un Amor Puro y así, todo lo demás se os dará por añadidura.
Satanás os ha llevado por caminos de error, para que busquéis primeramente la añadidura y, eso no es así, Mis pequeños.
Venid a Mí, arrepentidos y Mi Sangre Preciosa, os purificará.
Gracias, Mis pequeños.
Tercer Misterio. Habla Dios Padre.
Sobre: Espero entendáis lo antes posible, todo esto que os explico, porque os he dicho que estáis a momentos del Gran Cambio. No sabéis vosotros cómo se dará, pero estad seguros que se dará, os lo vengo anunciando de hace tiempo atrás y, como se dice en las Escrituras: ni un punto ni una coma, dejarán de cumplirse.
(Lenguas…) Hijitos Míos, alguna vez os he dicho que si os permitiera ver lo que os rodea a nivel espiritual, moriríais ipsofacto, o sea, de inmediato.
El príncipe de éste Mundo es satanás, vosotros estáis en sus dominios y vosotros habéis sido enviados por Mi Amor a la Tierra, a rescatar Mi Creación y rescatar a infinidad de almas que se han vuelto hacia el mal.
En las sagradas Escrituras se os da a entender lo que vale un alma. El rescate de un alma y su salvación eterna, Yo la pago inmensamente con grandes Bienes espirituales y con una eternidad de Amor.
Ya os he dicho, Mis pequeños, cómo os amo, pero llegará un momento en que sentiréis y viviréis Mi Amor y os daréis cuenta que no habíais nunca vivido un Amor semejante a lo largo de vuestra vida.
Las almas tienen un potencial inmenso. Si están bien guiadas, harán mucho Bien, si están mal guiadas, todo ése bien quedará encadenado por la maldad de satanás.
Por eso os insisto en que os deis cuenta del dolor, que Me causa un alma que Me ha dado la espalda por haberse dejado llevar por las tentaciones de satanás, pero sobre todo, porque ésa alma queda encadenada y todas ésas potencias que yo le concedí, para que fuerais poco a poco eliminando la maldad de la Tierra, se desperdician y, ni os van a ayudar a vosotros ni van a ayudar a vuestros hermanos.
Imaginad que ahora, estáis caminando entre el lodo, no lo veis, físicamente, pero es una realidad espiritual. Ese lodo os va deteniendo, es la maldad de satanás, que no permite que vuestra alma se desarrolle plenamente.
El pecado a donde os lleva satanás, es como un lodo espeso, que no os permite crecer, que hace que os dé flojera el buscarMe, vuestro intelecto queda afectado, o sea, que espiritualmente, satanás afecta vuestra alma, de forma en que no deis lo que debéis dar para salvar almas, empezando con la vuestra.
En estos tiempos, en que ya la gran mayoría de vosotros no oráis como debierais, en algún momento sentiréis ésa maldad de satanás, y es cuando sentiréis un terror muy grande que os envolverá, porque eso es satanás, maldad absoluta.
Quiero que entendáis todo esto, Mis pequeños, no os quiero amedrentar, no quiero que os asustéis, porque os he preparado para que no lleguéis a eso, Mi Amor es mucho más Poderoso que toda la maldad de satanás, pero lo malo es que no os habéis llenado de Mi Amor para que estéis protegidos.
Debéis seguir adelante, buscando la pureza de vuestra alma y el alimento espiritual, con el que podéis mover las almas de vuestros hermanos. Ciertamente, Mi Santo Espíritu, os está guiando y especialmente a aquellas almas que se han dejado mover plenamente por Mi Voluntad.
¡Qué difíciles sois, Mis pequeños! estáis viendo tanta maldad a vuestro alrededor y, sabiendo con qué evitarla, no lo hacéis.
Espero entendáis lo antes posible, todo esto que os explico, porque os he dicho que estáis a momentos del Gran Cambio. No sabéis vosotros cómo se dará, pero estad seguros que se dará, os lo vengo anunciando de hace tiempo atrás y, como se dice en las Escrituras: ni un punto ni una coma, dejarán de cumplirse.
Vuestra salvación o vuestra condenación, dependen plenamente de vosotros.
Buscad vuestra perfección y traedMe almas, Mis pequeños, tened Caridad hacia ellas, ciertamente vosotros abristeis vuestro corazón y habéis entendido Mi Amor por vosotros, pero hay infinidad de almas que no han abierto su corazón hacia Mí. Orad, orad, para que Mi Santo Espíritu penetre en ellas.
Os bendigo, Mis pequeños y recibid Mi Santo Espíritu, para que vaya guiándoos hacia la Verdad y que ésa misma Verdad, brote de vosotros para ayudar a muchos otros de vuestros hermanos.
Gracias, Mis pequeños.
Cuarto Misterio. Habla Dios Padre.
Sobre: Tenéis todo para la salvación de infinidad de almas. Os he preparado para ello, os repito y, ciertamente, que voy a tomar cuentas de lo que Yo he derramado sobre vosotros y lo que quiero que Me deis, que son las almas de vuestros hermanos.
Hijitos Míos, si os dais cuenta a dónde os he ido llevando con toda esta Evangelización que os he dado, es para que estéis más receptivos a los acontecimientos que se dan a vuestro alrededor y aquellos que van a ser para vuestra purificación, Mundial y Universal.
Hay tantas almas que están tan distraídas con las cosas del Mundo, que no ven la realidad del momento, a pesar de que hay situaciones que se salen ya, totalmente, de la normalidad de las estaciones del tiempo y, aun así, no quieren reconocer que algo está cambiando a su alrededor.
Eso es lo que hace satanás con las almas, la maldad os pone un velo en vuestros ojos, en vuestra mente, no reaccionáis como debierais reaccionar, si estuvierais en vida de Gracia, por consiguiente, no os dais cuenta de la realidad espiritual que os rodea.
Vamos a hablar de lo que realmente sois: soldados de amor. Un soldado en la batalla, está preparado para que no lo maten y crea un sexto sentido en su persona, que es la observación que debe desarrollar. Si por un segundo el soldado se distrae, la muerte lo puede alcanzar en ése momento de distracción.
Vosotros habéis sido preparados por Mí, vuestro Dios, en todo este tiempo de Evangelización, para que satanás no os destruya. Debéis ya estar capacitados para ver a vuestro alrededor las situaciones reales, espirituales, que os rodean, para que no os dejéis llevar por las situaciones en donde satanás os pone trampas para desviar vuestra atención espiritual, como lo hace con el resto de vuestros hermanos.
He invertido Mi Tiempo, Mi Amor en vosotros y he creado en vosotros una gran responsabilidad para ayudarMe en la salvación de las almas y, esto, Mis pequeños, debéis tomarlo muy en serio, porque hay infinidad de almas, de las que depende su salvación por vuestras oraciones y por vuestra donación.
Así como tuve Mis apóstoles en un principio, que fueron pescadores, que les pedí que fueran pescadores de almas y dejaran su antiguo trabajo, ahora sois vosotros los pescadores de almas de este tiempo, que deberéis traerMe, a Mi Corazón, a ésas almas que están distraídas en el Mundo y que no se están dando, entera cuenta, de lo que está sucediendo y que las puede llevar a la condenación eterna.
Son vuestros hermanos, son Mis hijos y quiero recuperarlos, vosotros tenéis, ya, en este momento, ésa confianza plena sobre Mí, de pedirMe lo necesario para que Yo os lo dé y podáis salvar a vuestros hermanos. Os he dicho que tenéis la obligación de producir milagros y que, además, tenéis acceso a lo que Yo os dejé escrito en las Sagradas Escrituras, de que aquellos que Me siguieran en estos tiempos, no solamente harían lo que Yo hice, sino que lo harían todavía más grande, lo haríais más grande con las Capacidades que Mi Santo Espíritu os dará.
Así que, Mis pequeños, tenéis todo para la salvación de infinidad de almas. Os he preparado para ello, os repito y, ciertamente, que voy a tomar cuentas de lo que Yo he derramado sobre vosotros y lo que quiero que Me deis, que son las almas de vuestros hermanos.
Por otro lado, sé pagar todo el bien que haréis, habéis sido almas escogidas en la Tierra para esta gran misión de salvación de almas y, si vuestra respuesta es satisfactoria, seréis almas escogidas en el Reino de los Cielos, para gozar de una forma más grande, junto a Mí, en el Reino de los Cielos.
Gracias, Mis pequeños.
Quinto Misterio. Habla Dios Padre.
Sobre: Para estos momentos de la historia y después de todo lo que os he enseñado, vuestra alma debe estar rebosando de alegría en el saber qué ya habéis sido escuchados por vuestros Dios y que todo cambiará para bien.
Hijitos Míos, para estos momentos de la historia y después de todo lo que os he enseñado, vuestra alma debe estar rebosando de alegría en el saber qué ya habéis sido escuchados por vuestros Dios y que todo cambiará para bien.
Satanás tendrá su castigo, los que le siguieron, también lo tendrán. Quedan las almas que están en duda, que no saben qué camino tomar, por eso, a vosotros, os he pedido que oréis para que encuentren el camino correcto. Pero, vosotros, los que habéis puesto todo vuestro empeño en vuestra salvación, os repito, debéis estar rebosando de alegría, porque vuestro momento se acerca ya, para gozarMe entre vosotros.
Soy vuestro Dios, Yo Me doy a las almas que Me buscan, a las almas que han luchado por defender su Fe, que han luchado por mantener el Amor entre vosotros, que han luchado contra aquellos que han maltratado todo lo que viene de Mí.
Enjugaré vuestras lágrimas y os haré gozar inmensamente; como el niño que recibe un regalo muy grande, el simple hecho de ver, desde lejos, la caja grande, donde viene su regalo, ya lo hace saltar de alegría y de contento. Os estoy, ya, mostrando ésa caja grande, es Mi Promesa y, ciertamente, se cumplirá.
Manteneos, Mis pequeños, ya es poco, muy, muy poco el tiempo que falta para que vosotros gocéis plenamente todo lo que os he prometido.
Mientras tanto, como os dijo Mi Hijo: “Amaos los unos a los otros”, gozad los unos con los otros y esperad, esperad con ansia ése momento gozoso que recibiréis. Sois Mis hijos predilectos, sois Mis hijos que os aplicasteis para cumplir correctamente vuestra misión y seréis recompensados, como solamente Yo, vuestro Dios, os puedo premiar.
Cantad de alegría, llenaos de ése júbilo Divino, porque, vuestro corazón, pronto estará rebozando de tanto Amor que Yo os daré.
Gracias, Mis pequeños.
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