"En todo dad gracias, pues esto es lo que Dios en Cristo Jesus quiere de vosotros. No extingais el Espiritu; no desprecies las profecias; examinadlo todo y quedados con lo bueno." 1 TESALONISENCES 5: 18-21

El hombre bueno, del buen tesoro del corazón saca lo bueno, y el malo, del malo saca lo malo. Porque de lo que rebosa el corazón habla su boca." San Lucas 6:45

QUE LA PRECIOSA SANGRE QUE BROTA DE LA SAGRADA CABEZA DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO, TEMPLO DE LA DIVINA SABIDURIA, TABERNACULO DEL DIVINO CONOCIMIENTO Y LUZ DEL CIELO Y DE LA TIERRA NOS CUBRA AHORA Y SIEMPRE. AMEN+++

“OH JESUS, CUBREME CON TU INFINITA SANGRE PRECIOSA CADA INSTANTE DE MI VIDA. AMEN"


"Ora y espera; no te inquietes. La inquietud no conduce a nada. Dios es misericordioso y

escuchará tu oración. Padre Pio"


jueves, 24 de septiembre de 2015

EVANGELIO DEL DIA Y HOMILIA : 22 DE SEPTIEMBRE DE 2015

Del Santo Evangelio según San Lucas 8,19-21.
 
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Su madre y sus hermanos fueron a verlo, pero no pudieron acercarse a causa de la multitud.
Entonces le anunciaron a Jesús: "Tu madre y tus hermanos están ahí afuera y quieren verte".
Pero él les respondió: "Mi madre y mis hermanos son los que escuchan la Palabra de Dios y la practican".
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Por Pbro. Luis Zazano Click aqui para audio

Lc. 8, 19-21:
 
Llamado, misión y  familiaridad son  tres partes importantes en la vida del cristiano. 
 
1) El hacer la voluntad de Dios implica reconocer tu llamado, lo que Dios te pide, a lo que Dios te llama y te invita a trabajar. Tenes que darte cuenta para que fuiste llamado. No estas aquí en este mundo para llenar lugar. Abrí los ojos y date cuenta.
 
2) Mision: ya que estamos en tiempo del mundial de rugby, un jugador si no está motivado para salir a ganar, a comerse la cancha es dificil que se banque los golpes y las caídas.  Ponete a ver que hay algunos que hasta juegan con sangre en la cara. Pero es que defienden su objetivo. Vos también tenes que tener en claro que tu misión es lo que da sentido a tu vida.
 
3) Familiaridad: aquí somos un equipo, no te la cortes solo. Somos familia, somos la familia de Jesús. En la familia nadie es igual, no somos un regimiento sino que somos Unidos no uniformados. Como me decía mi hermana "no porque no te guste la cebolla vas a dejar el guiso" no porque hayas tenido un choque con alguien de la parroquia vas a dejar de ir a misa o de encontrarte con Jesús.
 
Somos familia y estamos llamados a acompañarnos y ayudarnos, no a cortarnos.
 
Jugate en esta cancha y bancate los golpes, defende la pelota y logra cumplir la misión que Dios te puso y de paso festejamos en familia tu victoria.
 

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