"En todo dad gracias, pues esto es lo que Dios en Cristo Jesus quiere de vosotros. No extingais el Espiritu; no desprecies las profecias; examinadlo todo y quedados con lo bueno." 1 TESALONISENCES 5: 18-21

El hombre bueno, del buen tesoro del corazón saca lo bueno, y el malo, del malo saca lo malo. Porque de lo que rebosa el corazón habla su boca." San Lucas 6:45

QUE LA PRECIOSA SANGRE QUE BROTA DE LA SAGRADA CABEZA DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO, TEMPLO DE LA DIVINA SABIDURIA, TABERNACULO DEL DIVINO CONOCIMIENTO Y LUZ DEL CIELO Y DE LA TIERRA NOS CUBRA AHORA Y SIEMPRE. AMEN+++

“OH JESUS, CUBREME CON TU INFINITA SANGRE PRECIOSA CADA INSTANTE DE MI VIDA. AMEN"


"Ora y espera; no te inquietes. La inquietud no conduce a nada. Dios es misericordioso y

escuchará tu oración. Padre Pio"


jueves, 18 de febrero de 2016

EVANGELIO DEL DIA Y REFLEXION POR Pbro. LUIS ZAZANO. 18 DE FEBRERO DE 2016

Del Santo Evangelio según San Mateo 7,7-12.
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Jesús dijo a sus discípulos:
Pidan y se les dará; busquen y encontrarán; llamen y se les abrirá.
Porque todo el que pide, recibe; el que busca, encuentra; y al que llama, se le abrirá.
¿Quién de ustedes, cuando su hijo le pide pan, le da una piedra?
¿O si le pide un pez, le da una serpiente?
Si ustedes, que son malos, saben dar cosas buenas a sus hijos, ¡cuánto más el Padre celestial dará cosas buenas a aquellos que se las pidan!
Todo lo que deseen que los demás hagan por ustedes, háganlo por ellos: en esto consiste la Ley y los Profetas.
 
REFLEXION
Por Pbro. LUIS ZAZANO
 
Mt. 7, 7-12: este tiempo de cuaresma esta marcado por la oración y por el cambio de corazón que lleva a cambios de actitud.

1)  Oración pedigüeña: es saberte necesitado siempre de Dios, es Dios quien te muestra que está como ese Padre que constantemente esta viendo qué le falta a su hijo, pero también  es ese hijo que le dice al Padre sus necesidades. Mostrarle a Dios lo que necesita de Él para llegar a Él.
2) Cambios: aquí subdivido una diferencia:
A) DEBILIDAD: es aquello a lo que soy débil y me esfuerzo por vencer, lo reconozco y lo lucho; está marcado en mi vida y con la ayuda de Dios y mi sinceridad me esfuerzo día a día por vencerlo. Esto es debilidad, aquello que marca mi vida y mi historia, la reconozco y la enfrentó.  Ganó y pierdo.
B) MALDAD: es aquello que busco y me adhiero, quiero el daño del otro y es algo que sale de mi. Me complazco en la desgracia del otro y atento a la paz del hermano. Todo lo contrario a lo que invita al final del evangelio de hoy.
Tu debilidad te llevará a tener una gran fortaleza, si buscas la maldad te llevará a tener grandes amarguras y tristezas. ¡a cambiar y a rogar! 
 

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