Jesús se puso a hablarles en parábolas: "Un hombre plantó una viña, la cercó, cavó un lagar y construyó una torre de vigilancia. Después la arrendó a unos viñadores y se fue al extranjero.
A su debido tiempo, envió a un servidor para percibir de los viñadores la parte de los frutos que le correspondía.
Pero ellos lo tomaron, lo golpearon y lo echaron con las manos vacías.
De nuevo les envió a otro servidor, y a este también lo maltrataron y lo llenaron de ultrajes.
Envió a un tercero, y a este lo mataron. Y también golpearon o mataron a muchos otros.
Todavía le quedaba alguien, su hijo, a quien quería mucho, y lo mandó en último término, pensando: 'Respetarán a mi hijo'.
Pero los viñadores se dijeron: 'Este es el heredero: vamos a matarlo y la herencia será nuestra'.
Y apoderándose de él, lo mataron y lo arrojaron fuera de la viña.
¿Qué hará el dueño de la viña? Vendrá, acabará con los viñadores y entregará la viña a otros.
¿No han leído este pasaje de la Escritura: La piedra que los constructores rechazaron ha llegado a ser la piedra angular:
esta es la obra del Señor, admirable a nuestros ojos?".
Entonces buscaban la manera de detener a Jesús, porque comprendían que esta parábola la había dicho por ellos, pero tenían miedo de la multitud. Y dejándolo, se fueron.
Hay tres puntos que pueden alejarte de servir a Dios y caer en el mandar a Dios:
1) Indiferencia: es caer en un olvido de Dios, olvidarte para que fuiste hecho y por quien fuiste hecho. Es olvidarte de tu historia y creer que la vida comienza y termina con vos. La indiferencia es un asesinato en vida y es un arma letal porque mata sin tapujos.
2) Egocentrismo: a la vida la pasas por vos y no por Dios. Te medis todo según vos y parece como que todos te tienen que rendir cuenta de lo que hacen. En ves de caminar con el otro es que observas la vida de los otros.
3) Secularismo: es la situación de aquellos que se olvidan que están en el mundo pero no son del mundo. Son aquellos que viven una vida mundana en donde el consumismo y lo material es su gran preocupación. Es en vez de ver lo esencial de la vida buscan el compra venta de la vida. La vida misma se vuelve chata.
Busca en ser servidor de la viña del Señor y no el homicida de Dios que lo mata con la indiferencia, lo tapa con el egocentrismo y lo sepulcros con el secularismo.
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