Después de oírlo, muchos de sus discípulos decían: "¡Es duro este lenguaje! ¿Quién puede escucharlo?".
Jesús, sabiendo lo que sus discípulos murmuraban, les dijo: "¿Esto los escandaliza?
¿Qué pasará, entonces, cuando vean al Hijo del hombre subir donde estaba antes?
El Espíritu es el que da Vida, la carne de nada sirve. Las palabras que les dije son Espíritu y Vida.
Pero hay entre ustedes algunos que no creen". En efecto, Jesús sabía desde el primer momento quiénes eran los que no creían y quién era el que lo iba a entregar.
Y agregó: "Por eso les he dicho que nadie puede venir a mí, si el Padre no se lo concede".
Desde ese momento, muchos de sus discípulos se alejaron de él y dejaron de acompañarlo.
Jesús preguntó entonces a los Doce: "¿También ustedes quieren irse?".
Simón Pedro le respondió: "Señor, ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de Vida eterna.
Nosotros hemos creído y sabemos que eres el Santo de Dios".
MEDITACION
Por Pbro. LUIS ZAZANO
En el proceso del seguimiento a Jesús hay etapas; y una de esas etapas es "seguirlo en los momentos duros" cuando las cosas no cuadran con tu querer o cuando el Señor te pide algo que no quieres... es allí donde vos tenes que fijarte que a pesar de todo Él te da vida.
Toda renuncia exige responsabilidad; y toda responsabilidad exige entrega y confianza. Abandonate, es Él quien te da vida, no te mueras
No hay comentarios.:
Publicar un comentario